Cambiar tubos normales por los de LED: una práctica fácil y sostenible
La iluminación es uno de los aspectos más importantes en nuestros hogares y espacios de trabajo. De ella depende la confortabilidad de las personas, incidiendo directamente en el bienestar y salud de sus ocupantes. Una buena iluminación beneficia a la salud física y mental de las personas, así como al medio ambiente. Fruto de esta incidencia, la luz cada vez tiene más importancia y peso a la hora de diseñar espacios interiores. Esto ha ido unido a una evolución tecnológica sin precedentes que ha propiciado el lanzamiento de sistemas más eficientes, sostenibles y menos agresivos contra el bienestar de las personas. En esta transición destaca el paso de los antiguos tubos fluorescentes a los modernos tubos LED T8.
Qué son los tubos LED T8 y ventajas
Los tubos LED T8 se han erigido como la mejor alternativa a los tubos fluorescentes tradicionales. Están diseñados con la última tecnología LED, lo que ofrece una iluminación más brillante y eficiente. Entre las características que definen a estos tubos LED T8 destaca su eficiencia energética, ya que consumen hasta un 50% menos de energía que sus predecesores. Además, también tienen una vida útil más larga, llegando a durar más de 50.000 horas. Esto supone un importante ahorro en términos económicos.
En lo que se refiere a la calidad de la luz y al impacto en la visión y bienestar de las personas, los tubos LED generan una luz más clara y uniforme, eliminando el parpadeo y el zumbido característico de los fluorescentes, emitiendo al mismo tiempo menos calor durante su funcionamiento.
Además, los tubos LED también se caracterizan por no tener mercurio ni otros materiales tóxicos. Esto, a diferencia de los fluorescentes, significa que son más seguros para el medio ambiente y para todas las personas. Además, estos tubos LED son compatibles con las mismas bases que los tubos fluorescentes convencionales, lo que facilita enormemente su instalación.
La facilidad de cambiar estos tubos
El proceso de cambiar tubo led normal por led es muy sencillo, gracias precisamente a esta compatibilidad de las bases, y no requiere conocimientos técnicos avanzados. Para llevar a cabo este proceso tan solo hay que apagar la corriente eléctrica (para hacerlo con la mayor seguridad y evitar cualquier descarga), retirar los tubos antiguos fluorescentes con delicadeza e instalar los nuevos tubos LED en las mismas bases. Para que queden fijados con seguridad hay que girarlos.
Con este sencillo proceso, que puede durar menos de dos minutos, cualquier persona puede dar una nueva iluminación (más sana y eficiente) tanto en su vivienda como en sus empresas. Y es que los tubos LED se han erigido como la mejor opción a la hora de aportar luz en cualquier tipo de espacio.
Las ventajas, como hemos visto, son muchas para dejar de utilizar esta innovadora tecnología presente en el campo de la iluminación desde hace años. Ahorro económico, contribución al medio ambiente al reducir la huella de carbono, calidad de luz mejorada y un menor mantenimiento son, probablemente, los aspectos más importantes de los tubos LED 8 que cada vez son más populares.
En un contexto mundial caracterizado por la búsqueda de la eficiencia energética y la reducción de emisiones de CO2, el uso de este tipo de tubos LED puede suponer un importante avance hacia la consecución de estos objetivos medioambientales. Un pequeño gesto en casa o en la empresa puede ser de vital importancia para el futuro del planeta.
Por ello y siendo conscientes de la facilidad que implica cambiar tubos normales por los de LED, específicamente los tubos LED T8, es conveniente aprovechar las ventajas tanto económicas como ambientales que ofrece esta tecnología. Hay que apostar por ella sin dudarlo. Una decisión inteligente, tanto desde el punto de vista del bolsillo como del de la salud.
Mejorar la calidad de la iluminación en los hogares o en los negocios nunca ha sido tan sencillo como ahora gracias a los tubos LED. De fácil instalación, cualquier persona puede hacerlo sin necesidad de contratar a un especialista. Así que no lo dudes y si aún tienes tubos fluorescentes en casa o en tu negocio, empieza a cambiarlos por los LED. Estarás ahorrando dinero, al tiempo que contribuyes a un futuro más sostenible.
